Bancões no banco dos réus
domingo, 18 de dezembro de 2011
Manual de luta contra a droga
Resumo do livro
“(…) Mi situación personal se fue deteriorando y me encontraba cada vez peor. Necesitaba una raya nada más levantarme ya que si no la esnifaba me dolían los riñones, no paraba de bostezar, temblaba…; la tomaba y asunto solucionado…, hasta el desayuno. Tenía que “meterme” otra para poder desayunar, otra para salir de casa, otra a media mañana, otra antes de comer, después de comer, etc., etc., etc. Al principio la coca me quitaba las ganas de comer, más tarde era precisamente la raya la que me permitía alimentarme. Ya no era vida. Ya no podía disimularlo por más tiempo, así que me marché del pueblo a otro muy lejano: poner distancia. No me costó mucho “adaptarme” al nuevo escenario (…). Si algo quiero rescatar de mi historia es el daño tan terrible que causé a mis padres. Al comienzo, cuando sospecharon que estaba enganchado, trataban de ayudarme, hablaban -o intentaban hablar- conmigo. Se esforzaron por llegar a ese inaccesible hijo hasta lo indecible. Perdieron la sonrisa, las ganas de vivir. Ya no iban de vacaciones, no salían, sufrían y sufrían una situación que les hacía desangrarse lentamente, que mataba sus ilusiones… Un recuerdo inolvidable es la tristeza permanente instalada en sus avejentados rostros antes de tiempo. Mis padres aparentaban 10 ó 15 años más de los que realmente tenían. No dormían esperando mi regreso, no vivían…, y todo, gracias a mí… (…)
Un día robé un coche y fui a recoger a Lidia a la salida del trabajo. Todo bien. Llevaba un coche potente y mi novia, droga y dinero. Tuve un accidente… Lidia murió. Yo quedé en coma durante cerca de mes y medio. Desperté, no recordaba nada. ¿Dónde está Lidia? -preguntaba. Nada me decían, hasta que, una vez recuperado, me lo contaron. Parece ser que iba a mucha velocidad y perdí el control del coche. Iba drogado. Me detuvieron… (…)
Se nos mira como a basura, delincuentes, escoria…; pero, si nos paramos a pensar, todos recordamos a algún familiar o amigo que transitó ese camino. Era buena gente. Yo lo conocí. Era un chaval como yo, con sus locuras y sus certezas, su inseguridad y su ingenuidad… Ahora ya no está. Cuando se enganchó a la droga era otra cosa. Comenzó su carrera de delitos y prisión, hasta que, lamentablemente, murió en…, murió por…
No sé si se podrá calificar o no como enfermedad mental, lo que tengo de cierto -al menos para mí-, es que un drogodependiente está más cerca de la enfermedad mental que del delito, no sé si equidistante, pero lo cierto es que no es dueño de sí. Que algo más fuerte que él mismo le arrastra a delinquir, a hacer daño, a destruirse y es precisamente eso lo que nos debe de quedar en la retina cada vez que les observemos y nos atrevamos a juzgarles (…)”.
Esta es parte de una historia, de muchas historias. La droga está ahí, en la calle, al alcance de quien quiera buscarla. Destruye vidas, aniquila familias, ilusiones, esperanzas. Está en nuestras manos -en las de todos-, ayudar aportando nuestro granito de arena en esta contienda.
Un día robé un coche y fui a recoger a Lidia a la salida del trabajo. Todo bien. Llevaba un coche potente y mi novia, droga y dinero. Tuve un accidente… Lidia murió. Yo quedé en coma durante cerca de mes y medio. Desperté, no recordaba nada. ¿Dónde está Lidia? -preguntaba. Nada me decían, hasta que, una vez recuperado, me lo contaron. Parece ser que iba a mucha velocidad y perdí el control del coche. Iba drogado. Me detuvieron… (…)
Se nos mira como a basura, delincuentes, escoria…; pero, si nos paramos a pensar, todos recordamos a algún familiar o amigo que transitó ese camino. Era buena gente. Yo lo conocí. Era un chaval como yo, con sus locuras y sus certezas, su inseguridad y su ingenuidad… Ahora ya no está. Cuando se enganchó a la droga era otra cosa. Comenzó su carrera de delitos y prisión, hasta que, lamentablemente, murió en…, murió por…
No sé si se podrá calificar o no como enfermedad mental, lo que tengo de cierto -al menos para mí-, es que un drogodependiente está más cerca de la enfermedad mental que del delito, no sé si equidistante, pero lo cierto es que no es dueño de sí. Que algo más fuerte que él mismo le arrastra a delinquir, a hacer daño, a destruirse y es precisamente eso lo que nos debe de quedar en la retina cada vez que les observemos y nos atrevamos a juzgarles (…)”.
Esta es parte de una historia, de muchas historias. La droga está ahí, en la calle, al alcance de quien quiera buscarla. Destruye vidas, aniquila familias, ilusiones, esperanzas. Está en nuestras manos -en las de todos-, ayudar aportando nuestro granito de arena en esta contienda.
Justiça XXI: Programa de formação Avançada 2011
Curso de Formação - 18 de Março de 2011 a 21 de Janeiro de 2012
A gestão da investigação criminal num tempo de crise
13, 14, 20 e 21 de Janeiro de 2012, CES-Coimbra
Apresentação
Num tempo de crise económica e social, os problemas criminais assumem proporções e padrões diversificados em relação a tempos de maior estabilização. Exige-se, por isso, dos órgãos de polícia criminal e das autoridades judiciais respostas eficazes e diferenciadas no modo de trabalhar o processo tanto na investigação criminal como nas fases de julgamento.
Este curso pretende confrontar os formandos com novas abordagens críticas aos modelos de organização e gestão da investigação criminal adequados a estes tempos.
Novas criminalidades ou novas manifestações da mesma criminalidade, como a criminalidade violenta ou os crimes contra o património praticados em grandes escala e com graus de inovação muito acentuada, exigem dos profissionais capacidades inovadoras no modo de enfrentarem os problemas do combate a estas formas de criminalidade.
Evidenciam-se, por um lado, novos métodos de investigação, cada vez mais diferenciados e exigentes, mas também com graus de intrusão a direitos fundamentais muito acertivos. Por outro, as responsabilidades decorrentes das Leis de Organização da Investigação Criminal e da Politica Criminal impõem, nesta matéria, uma coordenação adequada e eficaz.
O curso pretende dotar os seus destinatários da capacidade e dos instrumentos teóricos e práticos necessários à concretização dos objectivos que decorrem de tais exigências sociais e imposições normativas.
Destinatários
Este curso é especialmente orientado para todos os profissionais da justiça penal designadamente magistrados do Ministério Público e judiciais, funcionários de órgãos de polícia de investigação criminal, advogados, funcionários judiciais, bem como a investigadores, estudantes de cursos pós-graduados de mestrado e/ou doutoramento.
PROGRAMA [consultar AQUI]
Coordenadores: Conceição Gomes (OPJ/CES) e José Mouraz Lopes (ASJP)
Local de realização do curso: Centro de Estudos Sociais – Coimbra
Duração do curso: 25 Horas
Data limite de inscrição: 11 de Janeiro de 2012
Inscrições
Modalidades de inscrição:
- Geral (180 Euros)- Associado da ASJP: beneficia de um desconto de 30% (126 euros) - Seleccionar na ficha de inscrição a modalidade "Associado da ASJP";
- Sindicalizado do SMMP: beneficia de um desconto de 30% (126 Euros), ao abrigo do protocolo firmado - Seleccionar na ficha de inscrição a modalidade "Sindicalizado do SMMP";
- Advogado e advogado estagiário inscrito no Conselho Distrital de Coimbra da Ordem dos Advogados: beneficia de um desconto de 30% (126 euros) - Seleccionar na ficha de inscrição a modalidade "Advogado/advogado estagiário do Conselho Distrital de Coimbra da OA";
- Órgão de Polícia Criminal: beneficia de um desconto de 30% (126 Euros), ao abrigo do protocolo firmado - Seleccionar na ficha de inscrição a modalidade "Órgão de Polícia Criminal”;
- Advogados e Advogados Estagiários inscritos nos Conselhos Distritais de Évora, Lisboa, Porto: beneficiam de um desconto de 10% (162 Euros), ao abrigo do protocolo firmado. - Seleccionar na ficha de inscrição a modalidade "advogado/advogados estagiários".
- Estudante: beneficia de um desconto de 10% (162 Euros) - Seleccionar na ficha de inscrição a modalidade "Estudante".
Nº limite de inscrições: 40
Contactos
E-mail: justicaxxi@ces.uc.pt
Telefone: 239 855 570/72/74
Fax: 239 855 589
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