La primera cumbre entre Zapatero, Chirac y Schröder se celebrará en septiembre
Obtener en España los antecedentes penales de un alemán o un francés sospechoso dejará de ser pronto un procedimiento largo. Tres grandes países de la UE -España, Francia y Alemania- tienen ya muy avanzados sus trabajos técnicos para poder compartir a partir del año próximo sus registros de antecedentes penales, lo que reducirá a pocos días la obtención de los datos por parte de las autoridades judiciales de los tres países. La iniciativa, presentada ayer en Bruselas, es la primera consecuencia concreta de la incorporación de España al eje París-Berlín para la construcción europea. Fuentes españolas confirmaron precisamente ayer que hay contactos muy avanzados para que en septiembre se celebre la primera cumbre tripartita entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; el presidente francés, Jacques Chirac, y el canciller alemán, Gerhard Schröder.
El encuentro, que escenificará la ampliación a Madrid de la tradicional alianza franco-alemana, será convocado, probablemente, en la capital española, aunque ese detalle aún no está cerrado, como tampoco la fecha.
La reunión versará, previsiblemente, sobre los grandes temas del futuro de la construcción europea, incluidas las consecuencias de la ampliación y las difíciles negociaciones sobre la financiación de la UE durante el periodo 2007-2013, un problema en el que las posiciones de Zapatero y los otros dos socios están enfrentadas.
Pero el acuerdo de intercomunicación de registros penales anunciado ayer será también evocado en el encuentro, a fin de animar a varios países comunitarios que podrían sumarse en breve a esta nueva iniciativa contra la impunidad en el seno de Europa.Los ministros de Justicia de los tres países implicados, Juan Fernando López Aguilar, por España; Dominique Preben, por Francia, y Brigitte Zypries, por Alemania, se reunieron ayer con la prensa durante una pausa del Consejo de Ministros al que asistían en Bruselas y explicaron este proyecto conjunto. Según sus previsiones, la interconexión entre los tres registros estará disponible ya a finales de este año y empezará a ser operativo a lo largo del próximo.
Reincidencia internacional
"El sistema nos va a permitir computar el agravante de reincidencia internacional", señaló López Aguilar. "Gracias a los medios electrónicos", explicó la ministra alemana Zypries, "vamos a disponer de información rápida sobre los criminales investigados y las condenas que han tenido en sus países".
El acuerdo entre los tres países será válido para cualquier tipo de delito y será muy especialmente útil para crímenes como terrorismo, corrupción, prostitución, narcotráfico o falsificación de moneda en los que reincidencia internacional sea un agravante. En vez de tener que enviar una comisión rogatoria como se hace ahora (cuya respuesta suele tardar entre ocho y diez meses), la justicia de uno de los tres países sólo tendrá que pedir a su registro central de antecedentes penales el relativo al delincuente investigado. Dicho registro los pedirá al registro central del otro país, que, a su vez, lo entregará en pocos días. La traducción de los datos deberá correr a cargo del país que pide los documentos.
López Aguilar insistió en que "sólo un autoridad judicial puede solicitar que se active este proceso. Sólo después de que se haya cursado la solicitud la autoridad del país miembro recaba los datos, los remite al país tercero y es el país tercero el que debe traducirlos antes de entregárselos a la instancia judicial. Esto evita el procedimiento actualmente farragoso de la comisión rogatoria".
El nuevo sistema requerirá, sin embargo, algunos ajustes técnico-jurídicos en las legislaciones de los países interesados a fin de armonizar y homogeneizar las figuras penales para que la intercomunicación registral funcione.
El responsable francés de Justicia detalló que ya en enero de 2003 el presidente francés y el canciller alemán acordaron trabajar bilateralmente sobre esta idea en un proyecto al que se invitó posteriormente a España, siendo presidente del Gobierno José María Aznar.
Podrían sumarse en breve al proyecto países como Bélgica, que ayer propuso al Consejo de Ministros de Justicia e Interior, reunido en Bruselas, una iniciativa similar a nivel europeo. Para Bélgica ha resultado especialmente penoso el caso del jardinero francés Michel Fourniret, que ha confesado haber violado y matado a casi una decena de jóvenes en Francia y Bélgica durante años y con total impunidad hasta ahora.
GABRIELA CAÑAS - Bruselas
EL PAÍS Internacional - 20-07-2004